La máquina que realiza las tomografías computadas en el Hospital de la Universidad de Vermont los ayuda a crear un modelo del cadáver de la momia en 3 dimensiones de tamaño natural –los médicos lograron sacar 10.000 imágenes de esta momia-. Esto sólo se logra llevando la máquina a niveles de fuerza electrónica que un cuerpo humano no podría soportar, mientras que el de la momia sí.

Se supone que el cuerpo de la momia pertenecía a una joven sirvienta egipcia de 14 años, y el mismo fue extraído del Robert Hull Fleming Museum por el Dr. Jason Johnson, con el fin de someterlo al scanner mencionado y así saber con exactitud las causas de la muerte de la joven, cuya momificación fue realizada en fino lino.

Lo que no se esperaba el Dr. Johnson era que estas técnicas podrían llegar a tener otras aplicaciones, incluso ayudar a determinar si los niños que mueren de pequeños son víctimas o no de asesinatos criminales.

Desde que la momia fue escaneada en noviembre, los médicos han venido trabajando con esta técnica en casos de muertes infantiles.

“Ya que la persona a ser escaneada no está viva, uno no se preocupa por la dosis de radiaciones”, expresó el radiólogo Christopher Filippi, quien ayudó en la tomografía de la momia y el desarrollo de la nueva técnica.